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Al entrar en Villa Olot, uno siente que abraza el horizonte de Cala Tarida, impresiona la cercanía al mar  y sus preciosas puestas de sol. Disfrutar de sus vistas desde prácticamente  cada rincón del hogar, añaden un valor intangible a esta propiedad, muy difícil de expresar en palabras.

Si bien inicialmente Villa Olot  simulaba ser como unas páginas en blanco que dejaban paso a la expresión de la naturaleza, actualmente

y para ofrecer valor añadido, todas las estancias han sido renovadas abrazando elementos como la madera y el fuego de la chimenea….dando lugar así,  con su nueva paleta de cálidos colores a un verdadero hogar, ofreciendo una experiencia única y confortable durante todo el año.